Dame el fuego de tu pasado y de tus sueños oscuros, dame
el beso en el silencio del deseo,
Extiéndeme tus manos por un instante, aquí en la
oscuridad de este universo estréchame tiernamente sin que el tiempo nos separe,
Déjame recorrer las líneas tibias de tu piel con mis
dedos, abre tu húmedo secreto una vez más,
Conviértete por esta noche en todos los besos que nunca
tuve, se por un instante aquel quejido que acecha mis sueños, déjame sentir cómo
te estremeces junto a mí, déjame ser el dueño de aquel paraíso que solo algunos
han alcanzado,
Ten mi cuerpo ahora, ya mañana él y yo viajaremos al
abismo del olvido…